VERONICA WOODHOUSE / Soledad Atzompa, Ver., a 3 de abril.- En un hecho sin precedentes en la historia de nuestro país, miles de indígenas nahuas que habitan en los 23 municipios de la Sierra de Zongolica, así como habitantes de las zonas urbanas cercanas, a pesar de sus diferentes preferencias partidistas, se unen a través de un Comité Ciudadano para exigir la destitución inmediata del titular de la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH), José Luis Soberanes, quién al emitir un dictamen apresurado un tanto tendencioso y parcial del caso de Ernestina Ascencio Rosario, anciana indígena que presuntamente fue violada por varios elementos del Ejército Mexicano, violentó el marco de legalidad y transparencia de las investigaciones en curso, así como los Derechos Humanos de los familiares de la hoy occisa, quienes únicamente piden justicia.
Durante aproximadamente cuatro horas, más de 150 representantes de las diferentes comunidades de los 23 municipios serranos, sostuvieron una reunión en la Casa Campesina para unificar criterios y llegar al acuerdo de que los indígenas nahuas de las diferentes corrientes políticas respaldan por completo a la familia Ascencio Rosario.
En la reunión sostenida, los representantes de las diferentes comunidades y municipios de la zona, llegaron al acuerdo de formar un Comité Ciudadano conformado de manera plural por las diversas corrientes, a través del cual se exige de manera inmediata la destitución de José Luis Soberanes como titular de la CNDH.
René Huerta, dirigente de la Coordinadora Regional de Organizaciones Indígenas de la Sierra de Zongolica (CROIZ), sostuvo que hasta el momento tanto los familiares de Ernestina Ascencio, como los indígenas de la zona, se han mostrado respetuosos de las instituciones, en especial de la CNDH, a quién a pesar de ir en contra de los Usos y Costumbres Indígenas, se le permitió llevar a cabo la exhumación del cadáver.
Sin embargo, dijo, este organismo, no respetó los tiempos establecidos para dar a conocer el resultado de la necroscopia entre 40 y 60 días, y emitió un dictamen un tanto apresurado en el que se obvia los resultados de la primera autopsia realizada, así como el dictamen médico de los doctores que atendieron a Rosario Ascencio, en el cual se asienta que la anciana de 73 años, además de haber sido brutalmente golpeada, fue violada tanto por la vía “idónea”, como la “no idónea”.
Asimismo, indicó que si este organismo o cualquier otra institución tiene pruebas en torno a este caso, estas deben ser entregadas tal y como corresponde a la Fiscalía Especial creada para llevar a cabo las investigaciones y, en su caso, castigar a los presuntos responsables.
Precisó que con el dictamen emitido, la CNDH, “arremete a la familia y a los pueblos indígenas no sólo de Veracruz, sino del país”.
Por su parte, Julio Atenco Vidal, regidor del ayuntamiento de Soledad de Atzompa y fundador de la CROIZ, tras precisar que el fallecimiento de Ascencio Rosario no fue “una muerte natural, sino un crimen”, informó que los indígenas nahuas no están dispuestos a permitir que este deleznable “crimen” sea cobijado bajo el manto de la impunidad, por ello, de ser necesario, en la búsqueda de la justicia, “se agotarán las instancias nacionales, pero también las internacionales”.
Asimismo, Atenco Vidal dio a conocer que en tanto no se aclaren la presunta participación de elementos castrenses en este lamentable incidente, pedirán al gobierno federal que la Sierra de Zongolica sea “desmilitarizada”.
Por su parte, Julio Inés Ascencio, hijo de la “Hermana Mayor” del pueblo nahua, asentó que lo único que la familia pide es justicia. “No estamos contra alguna persona”.
Cabe mencionar que este Comité Ciudadano conformado para defender los derechos de la familia Ascencio Rosario, dio a conocer que si en un tiempo prudente no se tienen resultados satisfactorios en torno a las investigaciones del caso, miles de indígenas iniciarán una serie de movilizaciones respaldados por diversas ONG, así como por los diferentes grupos políticos que han tomado como suyo el caso.
Durante aproximadamente cuatro horas, más de 150 representantes de las diferentes comunidades de los 23 municipios serranos, sostuvieron una reunión en la Casa Campesina para unificar criterios y llegar al acuerdo de que los indígenas nahuas de las diferentes corrientes políticas respaldan por completo a la familia Ascencio Rosario.
En la reunión sostenida, los representantes de las diferentes comunidades y municipios de la zona, llegaron al acuerdo de formar un Comité Ciudadano conformado de manera plural por las diversas corrientes, a través del cual se exige de manera inmediata la destitución de José Luis Soberanes como titular de la CNDH.
René Huerta, dirigente de la Coordinadora Regional de Organizaciones Indígenas de la Sierra de Zongolica (CROIZ), sostuvo que hasta el momento tanto los familiares de Ernestina Ascencio, como los indígenas de la zona, se han mostrado respetuosos de las instituciones, en especial de la CNDH, a quién a pesar de ir en contra de los Usos y Costumbres Indígenas, se le permitió llevar a cabo la exhumación del cadáver.
Sin embargo, dijo, este organismo, no respetó los tiempos establecidos para dar a conocer el resultado de la necroscopia entre 40 y 60 días, y emitió un dictamen un tanto apresurado en el que se obvia los resultados de la primera autopsia realizada, así como el dictamen médico de los doctores que atendieron a Rosario Ascencio, en el cual se asienta que la anciana de 73 años, además de haber sido brutalmente golpeada, fue violada tanto por la vía “idónea”, como la “no idónea”.
Asimismo, indicó que si este organismo o cualquier otra institución tiene pruebas en torno a este caso, estas deben ser entregadas tal y como corresponde a la Fiscalía Especial creada para llevar a cabo las investigaciones y, en su caso, castigar a los presuntos responsables.
Precisó que con el dictamen emitido, la CNDH, “arremete a la familia y a los pueblos indígenas no sólo de Veracruz, sino del país”.
Por su parte, Julio Atenco Vidal, regidor del ayuntamiento de Soledad de Atzompa y fundador de la CROIZ, tras precisar que el fallecimiento de Ascencio Rosario no fue “una muerte natural, sino un crimen”, informó que los indígenas nahuas no están dispuestos a permitir que este deleznable “crimen” sea cobijado bajo el manto de la impunidad, por ello, de ser necesario, en la búsqueda de la justicia, “se agotarán las instancias nacionales, pero también las internacionales”.
Asimismo, Atenco Vidal dio a conocer que en tanto no se aclaren la presunta participación de elementos castrenses en este lamentable incidente, pedirán al gobierno federal que la Sierra de Zongolica sea “desmilitarizada”.
Por su parte, Julio Inés Ascencio, hijo de la “Hermana Mayor” del pueblo nahua, asentó que lo único que la familia pide es justicia. “No estamos contra alguna persona”.
Cabe mencionar que este Comité Ciudadano conformado para defender los derechos de la familia Ascencio Rosario, dio a conocer que si en un tiempo prudente no se tienen resultados satisfactorios en torno a las investigaciones del caso, miles de indígenas iniciarán una serie de movilizaciones respaldados por diversas ONG, así como por los diferentes grupos políticos que han tomado como suyo el caso.
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