Exige la FARP respuesta del Gobierno Federal.
Felipe Villanueva Sánchez
Córdoba, Ver.-A través de los medios de comunicación electrónicos, las Fuerzas Armadas Revolucionarias del Pueblo (FARP) hicieron un llamado al gobierno federal, para la liberación de tres de sus militantes, mientras que llaman al pueblo a reflexionar ante un presunto imperialismo que se vive en la sociedad mexicana.
Señalan textualmente. "Los comandos de la Tendencia Democrática Revolucionaria-Ejército del Pueblo, exigimos al gobierno federal la inmediata presentación con vida de los tres militantes del PDPR-EPR capturados por los cuerpos policíacos el pasado 25 de mayo en la ciudad de Oaxaca quienes, tras ser privados de sus más elementales derechos y garantías individuales, están siendo brutalmente torturados, contraviniendo la cacareada legalidad neoliberal, pero a tono con la política de combate al supuesto terrorismo que el presidente espurio ha renovado, incluyendo dentro de éste a los movimientos sociales en resistencia, a fin de preservar los intereses del reducido grupo de empresarios neoliberales nacionales y extranjeros que, de manera tramposa y represiva, se apoderaron de las principales instituciones y recursos de nuestro país".
Los movimientos izquierdistas nacionales apoyan mediante sus páginas de Internet a grupos como la FARP y acusan también que: "Ante la insuficiente y desarticulada respuesta ciudadana frente a la imposición de gobernantes y leyes antidemocráticas y espurias (como la ley del ISSSTE, la del combate al supuesto terrorismo, etc.,), ante la brutal represión a los diversos movimientos sociales con su caudal de asesinatos, violaciones y encarcelamientos (Sicartsa, Atenco, APPO, etc.,), ante los excesos del ejército federal en el supuesto combate al narcotráfico expresados en violaciones y asesinatos de mujeres, y asesinatos de familias en retenes militares; y ante la práctica gubernamental de la desaparición forzada contra luchadores sociales y militantes del movimiento revolucionario armado, hacemos un llamado a las organizaciones revolucionarias armadas a recurrir al lenguaje simbólico de las armas como recurso de denuncia, de protesta y de defensa, como parte del proceso de materialización del proyecto de nación alternativo, antineoliberal y anticapitalista, que desde abajo, aunque de modo aún desarticulado, se viene impulsando en las más diversas regiones del país; proceso que requiere incluir el castigo a los políticos, industriales, policíacos y militares responsables de la represión al pueblo en lucha, de la guerra sucia contrainsurgente y de la guerra interna del narcotráfico, con base en la discusión, elaboración y promulgación, horizontal y democrática, de leyes revolucionarias en los respectivos territorios de influencia.
Las diferencias se discuten, no se condenan. Es hora de anteponer a ellas las coincidencias esenciales, a fin de articular respuestas efectivas a la escalada fascista y neoliberal del gobierno espurio federal".
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