Descubren mapachera del PRI con despensas; operaban para Granier
La bodega localizada en la ranchería Oriente, en las afueras de la ciudad de Comalcalco, está repleta de despensas, sacos de cemento, bicletas, cajas de galleta, paquetes de papel higiénico y cajas de botellas de aceite
COMALCALCO, TABASCO. 02 DE OCTUBRE DE 2006 .- Simpatizantes de la coalición Por el Bien de Todos e integrantes de la sociedad civil descubrieron este lunes una bodega repleta de despensas, bicicletas y sacos de cemento con propaganda del PRI, que sería repartida en los próximos días en las comunidades de este municipio, donde el tricolor perdió la elección federal con 18 mil votos de diferencia.
En una casa semiabandonada en un paraje de la ranchería Occidente, a 5 kilómetros de la cabecera municipal, se encontraban tres militantes del PRI que cuidaban la casa llena con diversos enseres, cuando fueron rodeados por perredistas, quienes esperaron varias horas a que salieran por su propia voluntad; al no hacerlo, poco después de las cinco de la tarde ingresaron al lugar.
Fueron los diputados federales, Francisco Sánchez Ramos y Silbestre Alvarez Ramón, quienes encabezaron el operativo. Ahí Sánchez Ramos dijo que el PRI siempre ha realizado estas prácticas de "mapacheras" y de nueva cuenta "queda evidenciado que un funcionario del ayuntamiento de Comalcalco es un mapache electoral, solo al verse rodeado de la gente tuvo que salir".
Al entrar a la casa, ubicada a la altura del kilómetro 135 de la carretera Cárdenas-Comalcalco, los perredistas confirmaron que en ese lugar se guardaban cientos de despensas y sacos de cemento. "Queremos despensas, queremos despensas", gritaron al momento de entrar a la casa.
En el inmueble donde también había una gran cantidad de cajas de galleta, paquetes de papel higiénico y cajas con botellas de aceite, -los enseres que llevan una despensa casera-, también se localizó una gran cantidad de propaganda de Andrés Granier Melo, candidato del PRI a la gubernatura, que en el inter al verse descubiertos los priistas dejaron regados por toda el área de la casa.
En el operativo que ellos mismos denominaron "caza mapaches", los perredistas detuvieron al propietario de la casa, José María Torres, quien fue identificado como trabajador del ayuntamiento, así como a Pablo Zentella Jiménez, uno de los operadores de la campaña de Luciano Camero, aspirante a la diputación local por el PRI.
En la calle estaban una camioneta Nissan negra de batea y sin placas, con calcomanías de Granier, y con dos bocinas, mientras que en el terreno se observaba un shadow blanco, también sin placas, en los que presumiblemente se transportaban las despensas.
El legislador Sánchez Ramos dijo que no es un hecho aislado sino que ocurre en toda la entidad "y lo hemos detectado poco a poco", como la semana pasada, cuando salió a la luz pública un video del subsecretario de Transporte presionando para obtener votos a favor de Andrés Granier.
"Saben que van a perder todo y la única manera de contener la ola amarilla, los efectos de Ojeda y Obrador, tienen que recurrir al gobierno federal y en este caso el estatal", mencionó.
Sánchez Ramos anticipó que los diputados federales de Tabasco encabezarán las brigadas "caza mapaches" para descubrir las bodegas donde guarda el PRI las despensas y otros regalos para comprar el voto y torcer la voluntad ciudadana.
Desde la mañana, los perredistas pidieron la intervención de las autoridades electorales y el Ministerio Público para dar fe del delito electoral que se estaba cometiendo, pero no fue sino hasta después de la irrupción en la casa que acudieron a dar fe de los hechos.
Antes, cerca de las dos de la tarde, unos veinte elementos de la policía municipal, al mando del comandante Rafael Domínguez, intentaron liberar a los "mapaches" pero no pudieron ante la superioridad numérica de los simpatizantes de Javier May Rodríguez, aspirante a la alcaldía.
Los efectivos llegaron al lugar en la patrullas 16, 17, 28 y 268 de la policía municipal y de inmediato quisieron pasar, pero la cordura de los militantes del PRD impidió que hubiera un enfrentamiento.
Entrevistado a la salida de su casa, José María Torre se contradijo varias veces en cuanto a sus versiones y al final consideró que regalar una despensa no afecta en nada a la ciudadanía.
"Yo sólo estoy resguardando, bueno no, mejor no estoy resguardando, es que un amigo me va a comprar este terreno por eso vine,", dijo primero José Torres.
Luego, ante las preguntas de los reporteros, cambió su versión y dijo que rentó la casa hace cuatro meses en 2 mil pesos al comerciante Martín Ramos, de la cabecera municipal, quien la utiliza como bodega.
"Hace rato vine pero luego aparecieron los señores y no me dejaron salir, yo no salía porque ellos me amenazaron que me iban a golpear", dijo el dueño de la casa, ante la molestia de la multitud que lo acusaba de mentiroso.
De ahí, justificó que en nada afecta a la población que le regalen despensas.
"La gente, el que lo recibe, sabe su conciencia hasta dónde va a llegar, no tan sólo es el PRI, todo mundo lo hace, la gente que al ratito le llega va a recibir las cosas, va a saber si vota por un partido o por otro (…) esa es la conciencia de la gente que lo va a recibir y es bienvenido de todos, porque como dicen, recibe lo que te den, toda la gente lo va a recibir porque es un beneficio para ellos", comentó.
Además, confirmó que es militante del Partido Revolucionario Institucional "y apoyo a todos los candidatos del PRI, al químico (Andrés Granier) también, todo lo que sea de ese partido", reafirmó.
Vecinos alertaron
La bodega fue descubierta gracias a las denuncias de las vecinas, quienes observaron irregularidades primero y luego hasta ofertas recibieron por parte de los "mapaches electorales".
"Yo soy dueña de la propiedad de enfrente y vine a ver si las naranjas ya habían madurado, cuando vi una camioneta de redilas color azul en el que cargaban cemento, observé que había muchas rodadas a la casa donde estaban las despensas, pero yo sabía que estaba deshabitada, por eso me llamó la atención, me quedé y vi que en ese momento estaban sacando cemento y papel sanitario", dijo una vecina que se negó a proporcionar su nombre.
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