I
La convulsión social en Oaxaca --con agudos y contrastantes matices políticos-- es un anticipo de lo que pudiere ocurrir en otros estados de la Federación mexicana.
Cierto. Ese atributo anticipatorio --premonitorio, diríamos, a fuer de precisión-- de la convulsionada sociedad oaxaqueña preocupa a no pocos gobernadores.
Preocupa, en particular, al gobernador de Veracruz, Fidel Herrera, quien, ante la voracidad mercenaria de muchos medios difusores locales, se apresta a publicar su propio periódico.
El síncope social en Oaxaca induce a ese gobernador --el de Veracruz-- a suponer que su colega Ulises Ruiz está solo, pese a que los medios difusores locales lo arropan.
Pero ese arropamiento le cuesta mucho dinero al erario y a don Ulises. Por ello, al señor Herrera le han convencido, al parecer, de que su periódico se financie con dinero público.
Para ello, un subsecretario de Finanzas del gobierno fidelista, de nombre Javier Duarte, canaliza recursos hacia un particular, cierto Othón González, para fines de difusión.
Para ello, el colaborador financiero de don Fidel --el señor Duarte-- y Othón González, operador invisible de medios de aquél, son percibidos como socios del gobernador.
Sin embargo, es posible que el propio gobernador Herrera ignore que los señores Duarte y González son vistos así --como sus socios-- en esa grotesca aventura difusora.
II
Huele mal ese asunto. La experiencia histórica no aconsejaría que un gobernador (o cualquier político) devenga en empresario difusor. En nuestro país hay muchos casos así.
Si tal percepción es correcta, esos individuos le hacen un desfavor a don Fidel. Pero quizá esa sea el artilugio para el aparente enriquecimiento de los señores Duarte y González.
Mas no nos desviemos del tema central. La perlesía social en Oaxaca preocupa a gobernadores no sólo del PRI y del PAN, sino también del mismísimo PRD.
Estos gobernadores temen un "contagio". Es decir, que la situación oaxaqueña se "monte" sobre los lomos de los estados circunvecinos de Chiapas, Guerrero, Puebla y Veracruz.
El uso, por parte de los gobernadores, de simplismos semánticos --los vocablos "contagio" y "montar"-- demuestra que no comprendende la naturaleza del sismo social oaxaqueño.
Ese tema dominó, como bien sabríalo el caro leyente, las sesiones de el cónclave más reciente del grupo de presión política creado hace varios años por los gobernadores.
Así, la Conferencia Nacional de Gobernadores, provista de un equívoco sentido de solidaria y de principio de autoridad, le otorgó públicamente su apoyo al señor Ruiz.
No sólo eso: presionaron al Presidente Fox para que no cediera a las demandas populares de que el gobernador Ruiz se vaya y que pondere reprimir por la fuerza la lucha social.
III
Sépase que don Ulises --un político corrupto hasta el cinismo-- preside un Poder Ejecutivo local que es sólo decorativo. Existe en un vacío de mando y autoridad.
Y, como secuela, es el titular de un Poder Ejecutivo cuyo alcance político y administraivo es limitadísimo. La convulsiòn social lo ha entrampado.
Y ha entrampado también al propio Presidente Fox y al Presidente Electo, Felipe Calderón, a quien se le considera mandatario espurio en amplios estamentos de la sociedad.
Entrampada, así mismo, hállase la oligarquía oaxaqueña que el propio gobernador Ruiz --orgulloso de ser plutócrata-- emblematiza.
¿Por qué temen esos gobernadores que el conflicto social en Oaxaca se derrame sobre otros estados de nuestra república que no es, por cierto, ni republicana ni democrática?
Las razones de ese temor no son, desde luego, exiguas. Tienen que ver con la desigualdad económica, la injusticia social y la iniquidad y sus terribles secuelas.
Esas secuelas son la pobreza, la desesperanza, el desempleo, la estratificación sociocultural, caída de las expectativas de bienestar. Esa es realidad insoslayable.
En esos estados --aun en Guerrero, gobernado nominalmente por el PRD-- esas causales del azogamiento del poder ante sacudimientos sociales son, precisamente, las mismas.
Contacto: ffernandezp@prodigy.com.mx
Glosario:
Artilugio: mecanismo, artefacto, sobre todo si es de cierta complicación.
Azogamiento: acción y efecto de azogar. Turbarse y agitarse mucho.
Convulsión: contracción intensa e involuntaria de los músicos del cuerpo, de origen patológico.
Perlesía: privación o disminución del movimiento de partes del cuerpo. Temblores.
La convulsión social en Oaxaca --con agudos y contrastantes matices políticos-- es un anticipo de lo que pudiere ocurrir en otros estados de la Federación mexicana.
Cierto. Ese atributo anticipatorio --premonitorio, diríamos, a fuer de precisión-- de la convulsionada sociedad oaxaqueña preocupa a no pocos gobernadores.
Preocupa, en particular, al gobernador de Veracruz, Fidel Herrera, quien, ante la voracidad mercenaria de muchos medios difusores locales, se apresta a publicar su propio periódico.
El síncope social en Oaxaca induce a ese gobernador --el de Veracruz-- a suponer que su colega Ulises Ruiz está solo, pese a que los medios difusores locales lo arropan.
Pero ese arropamiento le cuesta mucho dinero al erario y a don Ulises. Por ello, al señor Herrera le han convencido, al parecer, de que su periódico se financie con dinero público.
Para ello, un subsecretario de Finanzas del gobierno fidelista, de nombre Javier Duarte, canaliza recursos hacia un particular, cierto Othón González, para fines de difusión.
Para ello, el colaborador financiero de don Fidel --el señor Duarte-- y Othón González, operador invisible de medios de aquél, son percibidos como socios del gobernador.
Sin embargo, es posible que el propio gobernador Herrera ignore que los señores Duarte y González son vistos así --como sus socios-- en esa grotesca aventura difusora.
II
Huele mal ese asunto. La experiencia histórica no aconsejaría que un gobernador (o cualquier político) devenga en empresario difusor. En nuestro país hay muchos casos así.
Si tal percepción es correcta, esos individuos le hacen un desfavor a don Fidel. Pero quizá esa sea el artilugio para el aparente enriquecimiento de los señores Duarte y González.
Mas no nos desviemos del tema central. La perlesía social en Oaxaca preocupa a gobernadores no sólo del PRI y del PAN, sino también del mismísimo PRD.
Estos gobernadores temen un "contagio". Es decir, que la situación oaxaqueña se "monte" sobre los lomos de los estados circunvecinos de Chiapas, Guerrero, Puebla y Veracruz.
El uso, por parte de los gobernadores, de simplismos semánticos --los vocablos "contagio" y "montar"-- demuestra que no comprendende la naturaleza del sismo social oaxaqueño.
Ese tema dominó, como bien sabríalo el caro leyente, las sesiones de el cónclave más reciente del grupo de presión política creado hace varios años por los gobernadores.
Así, la Conferencia Nacional de Gobernadores, provista de un equívoco sentido de solidaria y de principio de autoridad, le otorgó públicamente su apoyo al señor Ruiz.
No sólo eso: presionaron al Presidente Fox para que no cediera a las demandas populares de que el gobernador Ruiz se vaya y que pondere reprimir por la fuerza la lucha social.
III
Sépase que don Ulises --un político corrupto hasta el cinismo-- preside un Poder Ejecutivo local que es sólo decorativo. Existe en un vacío de mando y autoridad.
Y, como secuela, es el titular de un Poder Ejecutivo cuyo alcance político y administraivo es limitadísimo. La convulsiòn social lo ha entrampado.
Y ha entrampado también al propio Presidente Fox y al Presidente Electo, Felipe Calderón, a quien se le considera mandatario espurio en amplios estamentos de la sociedad.
Entrampada, así mismo, hállase la oligarquía oaxaqueña que el propio gobernador Ruiz --orgulloso de ser plutócrata-- emblematiza.
¿Por qué temen esos gobernadores que el conflicto social en Oaxaca se derrame sobre otros estados de nuestra república que no es, por cierto, ni republicana ni democrática?
Las razones de ese temor no son, desde luego, exiguas. Tienen que ver con la desigualdad económica, la injusticia social y la iniquidad y sus terribles secuelas.
Esas secuelas son la pobreza, la desesperanza, el desempleo, la estratificación sociocultural, caída de las expectativas de bienestar. Esa es realidad insoslayable.
En esos estados --aun en Guerrero, gobernado nominalmente por el PRD-- esas causales del azogamiento del poder ante sacudimientos sociales son, precisamente, las mismas.
Contacto: ffernandezp@prodigy.com.mx
Glosario:
Artilugio: mecanismo, artefacto, sobre todo si es de cierta complicación.
Azogamiento: acción y efecto de azogar. Turbarse y agitarse mucho.
Convulsión: contracción intensa e involuntaria de los músicos del cuerpo, de origen patológico.
Perlesía: privación o disminución del movimiento de partes del cuerpo. Temblores.
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